lunes, 13 de junio de 2011

Los vidrios..

..y el limo se escurrían pegajosos entre los dedos de mis manos que los tomaban con tantas ganas.. y las uñas se llenaban de ese color tan oscuro.. y tan frío y húmedo estaba... y goteaba al río. Y la sangre se escurrió a borbotones por el cauce de la vida eligiendo simplemente no elegir y el aroma ácido de los coagulos fermentando con el oxígeno, llenaron mis pulmones de una fragancia estéril y tan definitiva... pero sucumbía el dolor ante la locura y se arrastraba impaciente... y todo era simplemente la vida.